Cartas del Tarot; El Ermitaño (9)

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El Ermitaño es una carta del Tarot que representa espiritualidad, muchas veces relacionada a la religión, incluso si usted es un ateo, ya que hace referencia al “espíritu", esa fuerza interior que mueve montañas, un estado emocional que a través de la reflexión logra las proezas más increíbles, entre ellas la auto superación.

 
Al igual que en el caso de la carta conocida como La Fuerza e incluso tal vez más la mente domina la materia y siempre apuesta a lo correcto por mas difícil que sea la situación, así como preocuparse por…

 
las necesidades y deseos de los demás, surge de la enseñanza del ermitaño. 


Trabajo: la carta del Ermitaño nos anticipa la llegada del éxito laboral y el reconocimiento postergado, por lo cual es momento de hacer lo posible para estar organizado y productivo, ya que esa actitud dará sus frutos en formas inesperadas o impredecibles, pero siempre positivas. Hacer "lo correcto" es la premisa del Ermitaño, incluso si nadie está mirando. 


Amor: Es posible que un romance del pasado haga su reaparición, sin embargo se deberá evaluar si es lo que realmente se quiere volver a vivir, ya que las relaciones amorosas como en las películas, segundas partes pueden no ser buenas. En una relación comprometida se deberá esforzar por mantener viva la chispa, algo que se puede ver dificultado por la necesidad de introspección para fortalecer el mundo interior. 


Finanzas: El tiempo del Ermitaño es un tiempo conservador cuando se trata de transacciones financieras, ya que el dinero no ocupa la prioridad de nuestra vida, por lo cual el flujo del dinero puede verse dificultado por una necesidad interna de una vida no material, por lo cual abstenerse de tomar decisiones importantes en este nivel puede resultar la mejor opción. 


Salud: el Ermitaño de por si es saludable ya que considera a su cuerpo como un templo que debe cuidar, por ello cuando hace su aparición en una tirada de Tarot, es importante realizarse un chequeo medico, para prevenir o tratar cualquier desequilibrio orgánico. En el caso de encontrarse enfermo intensificar la espiritualidad pondrá en marcha mecanismos de auto curación que van más allá de la comprensión, por ello el momento del Ermitaño es un momento de fe, y ésta todo lo puede.





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